Unidad de la izquierda
La clase obrera tiene la palabra.
Por: Miguel Ángel Albizures
La agrupación Clavel Rojo, que reivindica justas aspiraciones de la juventud patriótica de los años setenta, está convocando a la marcha del Primero de Mayo enviando un afiche que dice “La Unidad de la Izquierda Avanza”, que son muy buenos deseos, pero la realidad es que no se ve nada claro, los nubarrones sectarios siguen haciendo mella y cada quien quiere llevar agua a su molino, mientras el pueblo sigue esperando la construcción de una alternativa política que sea la esperanza de transformaciones sociales. Este Primero de Mayo como muchos otros, se levanta la bandera de la unidad y se volverá a repetir el 20 de Octubre, aniversario de la Revolución que hizo posible que el país dejara atrás por 10 primaveras, las oprobiosas dictaduras que le precedieron.
Hoy en día, estamos en pleno retroceso de conquistas sociales y de vigencia de derechos fundamentales, entre ellos el derecho a la vida, no sólo con el asesinato de hombres y mujeres de diversos sectores, sino de dirigentes sociales que se atreven a resistir la afrenta de las transnacionales y las actitudes entreguistas de los funcionarios que no dan muestras de voluntad política para frenar la explotación desmedida de la mano de obra, la deforestación y el saqueo de recursos naturales que tanto daño provoca al ambiente, al país y a las comunidades.
Dicen que una golondrina no hace verano y hay voces en la izquierda que se levantan pero aisladamente, porque no son capaces de encontrar los puntos que les unen y siguen machacando sobre todo aquello que no permitió una real unidad en el pasado reciente, ni lo permite hoy, porque cada quien se siente la mamá de Tarzán y quiere que todos bailen a su alrededor y acepten la pieza musical que a ellos les gusta. No hay pierde en los objetivos de transformación social, pero sí lo hay en el tipo de alianzas que pueden y deben hacerse escudriñando en todo el ámbito político nacional. ¡Yo no me junto con la fulana porque… ni con los zutanos porque esos…!, son las expresiones comunes que hacen imposible un proceso unitario que convierta a las expresiones de izquierda en alternativa de poder. Ojalá y esta situación que vivimos hoy permita dar pasos reales para alcanzar consensos hacia el futuro y que este Primero de Mayo no se depongan las banderas de lucha, sino los sectarismos, las ambiciones personales, las embestidas a personas y organizaciones que quieren aportar a construir la otra Guatemala. La clase obrera tiene la palabra y debe pujar por una verdadera unidad, pero para ello, sus bases y su dirigencia deben dar el ejemplo, pues son los y las trabajadoras quienes cargan con el peso de la injusticia social y sufren las consecuencias de las divisiones.
Fuente: http://www.elperiodico.com.gt/
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