Dos grandes valores

Dos grandes valores
Por Ileana Alamilla - Guatemala, 8 de abril de 2010iliaalamilla@hotmail.com

Como una brisa fresca y reconfortante recibimos dos noticias recientes que pasaron casi desapercibidas.

Jesús Tecú Osorio, un defensor de los derechos humanos de los indígenas, sobreviviente del genocidio, fue distinguido con el Premio Medalla de la Libertad Roger N. Baldwin, en New York, galardón que se otorga cada dos años a un activista u organización fuera de los Estados Unidos, según informó Human Rigths First.

Fue seleccionado entre más de 50 nominaciones de defensores de derechos humanos extraordinarios de todas partes del mundo, por sus méritos en la lucha por procurar justicia para las víctimas del genocidio y por su tenacidad para hacer avanzar los derechos de las comunidades indígenas de Guatemala.

Jesús Tecú era solo un niño de 10 años cuando fue testigo del asesinato de su familia, durante una masacre que exterminó a casi todos los habitantes de la remota aldea en que vivía en Guatemala. Fue secuestrado para trabajar en la casa de un oficial militar.

En el anuncio que hizo la entidad se mencionan sus méritos y parte de la dramática historia del país. Entre otras cosas, dice: “En lo que las Naciones Unidas han calificado como genocidio, aproximadamente 250 mil personas, la mayoría de ellas indígenas mayas, fueron masacradas entre 1960 y 1996 por fuerzas del Estado. Fue quizás la peor violación de derechos humanos del siglo XX en el hemisferio occidental. Hoy, casi tres décadas más tarde, muchos de los responsables de estas atrocidades continúan ocupando posiciones de poder en Guatemala”.

Tecú sobrevivió a una de las atrocidades más emblemáticas: la matanza en Río Negro, en 1982. Casi todos los habitantes de esa comunidad fueron asesinados a sangre fría por los militares y paramilitares. Ha fundado tres organizaciones en Rabinal: la Fundación Nueva Esperanza, la Asociación para el Desarrollo Integral de las Víctimas de Violencia en las Verapaces, Maya-Achí (ADIVIMA), y el Bufete Jurídico Popular de Rabinal. Es un testigo clave en los procesos penales contra altos oficiales guatemaltecos, llevados en España y Guatemala y ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

El premio ganado por Tecú se estableció en 1989, en honor al principal fundador de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) y la Liga Internacional por los Derechos Humanos.

También se conoció que Raquel Zelaya, secretaria ejecutiva de ASIES, fue nombrada por el secretario general de las Naciones Unidas como miembro del grupo asesor del Fondo del Establecimiento de Paz en el Mundo, que verifica y acompaña el trabajo de la Comisión de Consolidación de la paz de la ONU, creada en el 2006 por el Consejo de Seguridad y la Asamblea General, para canalizar los recursos y proponer estrategias integrales, ofrecer asesoramiento y apoyar en tareas de reconstrucción, consolidación de instituciones y desarrollo sostenible en los países que han sufrido conflictos internos.

En tres países ha recaído la representación en mujeres de alta trayectoria: Holanda, Brasil y Guatemala. La licenciada Zelaya fue firmante de los Acuerdos de Paz en diciembre de 1996, la primera secretaria de la Paz en la posguerra; tiene una amplia trayectoria de participación cívica en el Foro Guatemala, Grupo Barómetro, Convocatoria Ciudadana y ha recibido diversos reconocimientos y, sobre todo, es una persona de reconocida honorabilidad. Podemos sentirnos orgullosas(os) de estos dos valores.

Fuente: www.prensalibre.com.gt