En medio de la tragedia

En medio de la tragedia

El abandono de pueblos enteros.

Miguel Ángel Albizures

Guatemala parece condenaba a que cada año le llueva sobre mojado sin que las autoridades tomen conciencia de la importancia de prevención y no de acciones desesperadas cuando los acontecimientos han cobrado innumerables vidas, pues como siempre los afectados son aquellos que viven en el campo, en las villas miseria y quienes casi no tienen nada y pierden lo poco que recuperaron de tragedias anteriores. La franja del Polochic, es un ejemplo de lo que representa el abandono de poblaciones enteras, entre ellas Panzós en donde hace 32 años se unificaron finqueros, autoridades municipales y militares para marcar el inicio brutal de las masacres en el agro.En medio de la tragedia se conmemoró el 32 aniversario de la masacre de Panzós con la presentación del libro de la escritora Victoria Sanford que recoge importantes testimonios de sobrevivientes de aquel hecho ocurrido cuando el gobierno de Kjell Laugerud llegaba a su fin, y que cobró la vida de más de 100 personas que exigían su derecho a la tierra. Sanford hace un recorrido histórico que demuestra quiénes eran los legítimos dueños de esas tierras, el despojo que sufrieron y la muerte que sembraron y siguen sembrando quienes se han ido apropiando de las tierras comunales.

Como bien lo señaló Carolina Escobar Sarti, el libro La Masacre de Panzós: Etnicidad, tierra y violencia en Guatemala es la palabra que rompe el silencio, porque queremos dejar atrás los 32 años de silencio e impunidad que ha vivido Panzós. Hemos venido a devolverles su historia, pero también la esperanza, porque queremos decirles que Panzós es Guatemala y que la paz que queremos para Panzós, es la paz que queremos para todo el país. Las comunidades aprovecharon para hacer entrega a la licenciada María Eugenia Morales, procuradora adjunta, de sus reivindicaciones históricas, como el acceso a la tierra, el juicio a los responsables materiales e intelectuales de la masacre, hasta el resarcimiento integral, el cumplimiento del Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo, las cuales se comprometió la procuradora adjunta a entregar al Procurador, al Presidente de la República y a otras autoridades que compete poner atención a los hechos de violencia y despojo que siguen aconteciendo en esa región. Fue importante la presencia de más de mil personas en el acto, en su mayoría jóvenes que por esa época no habían nacido, pero que prestaban atención a una historia que marcó a su pueblo y a ellos mismos y que hoy deben tomar conciencia para impedir que hechos de lesa humanidad vuelvan a enlutar al país.

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