miércoles, 10 de marzo de 2010

Parlamento salvadoreño aprueba Día de Monseñor Romero

Parlamento salvadoreño aprueba Día de Monseñor Romero 

Marzo 2010

Fuente www.contrapunto.com.sv

Parlamento salvadoreño, en un acto sin precedentes, instauró el 24 de marzo como Día de Monseñor Oscar Arnulfo Romero; la fracción de ARENA no votó y uno de sus diputados dice que Romero es una “figura política”, no espiritual.


SAN SALVADOR - El parlamento salvadoreño aprobó este jueves un decreto legislativo que instaura los 24 de marzo de todos los años, a partir de este mes, como el “Día de Monseñor Oscar Arnulfo Romero”, quien fuera Arzobispo de San Salvador y fuera asesinado por un escuadrón de la muerte de ultraderecha en 1980, hecho que conmocionó al mundo entero y se constituyó en uno de los factores que originaron la guerra civil en El Salvador.

El decreto se conformó a partir de una iniciativa llevada recientemente al legislativo por quien fuera secretario de Monseñor Romero hasta su muerte, el padre Ricardo Urioste, acompañado por un grupo de líderes cívicos, quienes propusieron que se decretara el 24 de marzo el “Día de Monseñor Oscar Arnulfo Romero”.

El 24 de marzo de 1980 Monseñor Romero acudió a dar una misa al Hospital “La Divina Providencia”. Estaba en el altar de la Capilla del hospitalito cuando un francotirador le disparó una bala explosiva que le entró en el pecho y le hizo estallar el corazón. El Arzobispo murió en el acto.

Romero era considerado “enemigo” y “cura comunista” por los sectores de ultraderecha que lideraban militares en retiro, grandes capitalistas y políticos anticomunistas, cuya cabeza visible era Roberto D´Aubuisson, señalado como el autor intelectual del magnicidio tras varias investigaciones nacionales e internacionales. Estos sectores después en 1981 fundan el partido Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), en medio de una guerra civil.

“Este día votamos los diputados salvadoreños, con 56 votos hemos establecido el 24 de marzo como el Día de Monseñor Romero... Solamente los diputados de ARENA no votaron. De ahí, todos votaron a favor, incluso los diputados de Gran Alianza Nacional (GANA), que antes pertenecieron a ARENA”, apuntó el sacerdote y diputado del izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), David Rodríguez.

El parlamento salvadoreño está integrado en total por 84 diputados. No todos los diputados estuvieron presentes a la hora de votar; la fracción de ARENA, fundada por D´Aubuisson, no dio los votos, según funcionarios de este partido lo que hicieron fue abstenerse.

David Rodríguez dijo que “lo aprobado tiene un profundo significado porque responde al clamor del pueblo salvadoreño y de los católicos del mundo, que ven en Romero un ejemplo de sacrificio y de lucha por la justicia y por la igualdad entre los pobres”.

El magnicidio
Romero, quizás el más carismático de los líderes religiosos de El Salvador, fue un defensor de los derechos humanos en medio de una terrible represión militar y dictatorial que casi a diario masacraba las manifestaciones de obreros, campesinos, estudiantes y maestros que pedían justicia y libertad en las calles de San Salvador.

El 23 de marzo, el domingo antes de su asesinato, Romero hizo un llamado a las bases del ejército y de las fuerzas de seguridad: “En nombre de Dios, pues, y en nombre de este sufrido pueblo cuyos lamentos suben hasta el cielo cada día más tumultuosos, les suplico, les ruego, les ordeno en nombre de Dios: ¡Cese la represión!”.

“Esto constituye para nosotros los diputados del FMLN, un compromiso de dictaminar políticas que vayan siempre vayan en beneficio del pueblo, combatir la corrupción, cumplir la ley y combatir la pobreza”, apuntó Rodríguez.

El cura y diputado David Rodríguez fue uno de los religiosos que durante la guerra civil dejaron los hábitos y el púlpito y se incorporaron a las filas insurgentes del FMLN.

“Me siento feliz con esto. Conocí a Monseñor Romero de cerca. Él, incluso, en su diario personal anotó sentirse preocupado cuando fui capturado por el ejército... Como salvadoreño, como humano y como sacerdote, es también un compromiso para mi y es alegría saber que nuestro Monseñor Romero es reconocido y homenajeado por el mundo entero”, apuntó Rodríguez, quien finalmente opinó que “no cree que el Vaticano los canonice tan luego”.

“Quizás será santificado cuando ya halla desaparecido toda esta generación que conoció a Romero, porque lo que sucede es que Romero aún levanta muchas pasiones, por ejemplo, vemos aquí que los de ARENA no quisieron apoyar esta histórica moción legislativa”, finalizó Rodríguez.

Valiente de ARENA dijo: “El mundo está lleno de héroes, algunos lo merecen y otros no”

Por su parte, el diputado y dirigente de ARENA, Mario Valiente dijo que “Monseñor Romero no era santo de mi devoción. Siempre le oí mensajes altamente conflictivos. Es cierto que había muchas cosas equivocadas de parte del gobierno y de las fuerzas de seguridad, pero nunca le oí criticar ningún asesinato ni secuestro de los que estaba haciendo la izquierda. Entonces no balanceaba”.

Valiente defendió al líder fundador de su partido: “Siempre han acusado al Mayor D´Aubuisson del asesinato. Era un hombre muy listo (D´Aubuisson), no iba a cometer la torpeza, dejando aparte el tema ético, no iba a cometer esa torpeza. Quisieron hacer lo mismo que en Nicaragua, que asesinaron a Pedro Martín Chamorro para levantar a la gente en contra de Somoza. Allá les funcionó, aquí no les funcionó. Yo fui testigo en el entierro de Monseñor Romero en la catedral quienes provocaron una avalancha impresionante de gente fue la misma izquierda, para ver si levantaban a la gente y no la levantaron, y ahí se fueron a la montaña”.

Y continuó haciendo reflexiones históricas: “Desde mi perspectiva quisieron hacer lo mismo, quienes lo mataron fueron ellos mismos (la izquierda) y quisieron culpar a la derecha, concretamente al Mayor D´Aubuisson”.

Por otra parte, y ante el proceso de canonización que se encamina en el Vaticano para santificar a Romero, el diputado derechista señalo que le “parece que está demasiado politizado para que lo santifiquen. Es un personaje político, no espiritual”.

El pasado 27 de febrero, cuando el presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva se encontraba de visita en El Salvador y visitó la cripta de la Catedral Metropolitana, el Obispo auxiliar de San Salvador, Gregorio Rosa Chávez, aseguró que el Vaticano enviará a San Salvador, el 24 de marzo próximo, a un emisario que “traerá nuevas noticias”.

Para Ana Alfaro, una devota de “San Monseñor Romero”, no importa si el Vaticano santifica o no a Monseñor Romero: “él es ya nuestro Santo y el milagro nos está haciendo de cambiar este país”.

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